viernes, 27 de marzo de 2009

Springtime

Ayer olí por primera vez en unos meses unos jazmines en flor, definitivamente, la primavera ya llegó. Se nota en cómo calienta el sol, en las caras de la gente, en los estudiantes de mi Universidad con menos ropa que de costumbre... y tonteando más de lo normal.Se nota en que tengo más ganas de sonreír y en que me siento mejor.Por eso, hoy escribo sólo para desearos una buena entrada de primavera, y dejaros un vídeo divertido y primaveral. Que tengáis un buen día



domingo, 22 de marzo de 2009

BERLÍN

No podía evitar montarme en un vagón de la línea S-Bahn de Berlín y observar a la gente con curiosidad. Si me encontraba con alguna persona mayor de 60 años, me emocionaba al pensar lo que esos ojos han visto a lo largo de su vida, lo que han vivido: los horrores de la 2ª Guerra Mundial, el aislamiento de la Guerra Fría, materializado posteriormente por un horrendo muro que posiblemente le separó de su familia y, por último, la euforia de aquella noche de noviembre del 89 en que pudieron salir a la calle y arrancarlo de cuajo. Ahora se le ve tranquilo.

Toda esa historia reciente se palpa en Berlín, las calles y las gentes nos hablan de ella. La arquitectura de Berlín es una mezcla, mezcla de austeridad y modernidad, de enormes edificios históricos y cristaleras psicodélicas. Si alguien no cree en la posibilidad de integrar en armonía arquitectura contemporánea con clásica, sólo tiene que pasear por Berlín.


Berlín es la huella que ha dejado un choque de ideologías, una ciudad revuelta por la historia que ha sabido adaptarse perfectamente después de los achaques que ha sufrido. Ahora es un refugio de artistas bohemios, un lugar para crear una galería de arte, una ciudad con restaurantes de comida tailandesa, vietnamita, japonesa o india en una sola calle. La gente está liberada, los berlineses pasean libres, vestidos cada uno a su manera, tranquilos. En Berlín se respira paz, ahora sí.

domingo, 8 de marzo de 2009

Decepción literaria


Ésta es la historia de una mujer española que no duda en dejarlo todo y someterse a innumerables sufrimientos sólo por amor...

Esa es la idea usada como gancho en el libro "Un burka por amor". Debo reconocerlo, es un gancho muy efectivo. Al leer la contraportada del libro que me regalaron en navidad, la historia me interesó muchísimo.

Reyes Monforte nos cuenta la historia real de María Galera, una mallorquina que se enamora de un afgano y en cuestión de un par de años acaba convertida al islam, casada, con un hijo y atrapada en Afganistán en una guerra de la que ni siquiera había oído hablar. Pues bien, empecé el libro muy entusiasmada, pensando que esta historia me conmovería.

Y sí, así ha sido, porque la historia es espeluznante desde luego. Las penalidades que sufrió esa mujer son increíbles, la precariedad con la que tuvo que criar a sus hijos pone la piel de gallina y los momentos que tuvo que pasar en un refugio bajo tierra durante los bombardeos de la guerra estremecen sólo de imaginarlos.

Pero a mí, lo siento, no me convence. Esto no es una historia de amor, es una historia de egoísmo o insensatez. Cuando leí "una española atrapada en Afganistán" pensé que realmente quedó atrapada, pero no fue exactamente así: durante un tiempo fue ella la que quería permanecer allí. Tal vez no entiendo bien qué es el amor (y eso que yo me consideraba romántica), pero lo que esta muchacha sentía era más inseguridad e inmadurez, una inmadurez que le hacía necesitar a su marido para vivir (ojo, necesitar no es querer, al menos desde mi punto de vista). ¿Por qué pienso ésto? Pues porque a María la consiguieron sacar de Afganistán cuando apenas tenía comida para alimentar a sus dos hijos, y a los dos meses ella decidió volver porque no era capaz de vivir sin su marido, pero no volvió sola, no, se llevó con ella a sus dos hijos, que otra vez tuvieron que pasar hambre en ese país de necesidades y guerras. Todo ello, después de que su santa hermana Rosie se hubiese endeudado para poder traer de vuelta a España a María.

Realmente he quedado impactada al leer libro, pero por lo contrario a lo que me esperaba. Me ha estremecido al pensar que realmente alguien es capaz de hacer algo así, tan impulsivo e inmaduro y llamarlo amor verdadero.

Y otra cuestión aparte es la redacción de la novela. No conocía a Reyes Monforte de antes, y no sé si es buena como periodista, así que eso no puedo juzgarlo, pero como novelista creo que aun le queda un largo camino por recorrer. El libro está lleno de incongruencias, con lapsos de tiempo que desconciertan, contradicciones, pobre de vocabulario y con gran cantidad de erratas. Y por eso ya no sé si la historia de María me ha resultado tan extravagante debido a que realmente fue así o porque la redacción del libro me ha impedido captar todos los matices.

Para lo que me ha servido el libro es para interesarme más aún por la historia de Afganistán y por la forma de vida que allí tienen, en especial las mujeres. En varias ocasiones he recurrido a internet para profundizar más aún en los temas que me iban llamando la atención, como por ejemplo, en cómo es un burka en detalle. Me da pena que un tema tan interesante y descorazonador haya sido tratado en el libro de forma tan superficial.

Por último, os dejo el resumen de la historia de María Galera contada por Reyes Monforte. ¿Qué os parece? Sé que hablando así de esta historia puedo parecer fría e insensible, sin embargo os animo a que os informéis de cómo ocurrió y me transmitais vuestras opiniones.

lunes, 2 de marzo de 2009

Seis

Ahora ya conozco tus manías, ya sé que de vez en cuando te enfadas si no se te da la razón, ahora ya he descubierto tu parte más caprichosa, ahora sé que te encanta mandarle a la gente lo que debe de hacer...Hace seis años no sabía nada de eso...Ni tú tampoco conocías las mías.

Ahora ya nos conocemos, no somos perfectos, ni distintos a los demás, solo somos tú y yo, pero con eso me vale.

Porque por muchos años que pasen, nunca nos dejemos llevar a unas vidas irremediablemente vacías ;-)

Te dejo un regalito